La "descoberta" de una gran quantitat de gravats prehistòrics a la cova d'Arturra ha estat noticia la premsa des darrers dies. D'entrada ens pot sorprendre que en una cavitat coneguda de sobte es troben mostres d'art rupestre que havien passat desapercebudes...però no és gens estrany, cal els ulls d'un especialista per identificar que aquestes incisions son gravats intencionats que ens mostrens figures recognoscibles.
Algunes interpretacions que ajuden a veure-ho més clar: A l'esquerra el gravat original i a la dreta la superposició del traç blanc que destaca les línies del dibuix.
Noticia al Diario Vasco 25.05.2016
Ara s'està estudiant a fons i es realitza una restitució 3D.
La presentació pública ha tingut una gran difusió mediàtica de la que us presentem un parell de vídeos.
Es un verdadero milagro que se hayan conservado. La cueva de Atxurra es, sin lugar a dudas, la más visitada de Bizkaia desde 1882 (año en que quedó al descubierto por una voladura) y una de las que más agresiones ha sufrido: hay miles de pintadas, sobre todo en la galería de los grabados, a muy pocos centímetros de ellos, y no queda un solo espeleotema entero en toda la cueva. Nosotros mismos, al hacer el primer mapa topográfico en 2011, vimos los caballos de la foto, y no les dimos importancia al pensar que se trataba de una más de las pintadas. Este descubrimiento (y todos los que los espeleólogos vascos estamos haciendo durante los últimos 4 años) se deriva de que el equipo de Garate & Rios nos ha enseñado a distinguir lo que tenemos que buscar. Hasta ahora buscábamos sólo setas, y nos dejábamos los rolex ;-)
Es un verdadero milagro que se hayan conservado. La cueva de Atxurra es, sin lugar a dudas, la más visitada de Bizkaia desde 1882 (año en que quedó al descubierto por una voladura) y una de las que más agresiones ha sufrido: hay miles de pintadas, sobre todo en la galería de los grabados, a muy pocos centímetros de ellos, y no queda un solo espeleotema entero en toda la cueva. Nosotros mismos, al hacer el primer mapa topográfico en 2011, vimos los caballos de la foto, y no les dimos importancia al pensar que se trataba de una más de las pintadas. Este descubrimiento (y todos los que los espeleólogos vascos estamos haciendo durante los últimos 4 años) se deriva de que el equipo de Garate & Rios nos ha enseñado a distinguir lo que tenemos que buscar. Hasta ahora buscábamos sólo setas, y nos dejábamos los rolex ;-)
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